Buda

Desperté en Nanchital con el eco del rock y el anhelo de travesías que nunca imaginé. 
Mi vida, ha sido una melodía interrumpida de búsqueda y transformación, justo como me lo enseña el libro "El Buda en tu espejo".

Un amigo budista de Delhi me ha obsequiado este libro hace unos meses, el mismo cuate con el que fui a ver a Herbie Hancock, y el mismo Herbie hace un prefacio en este libro acerca del efecto positivo del budismo en su vida, después de leer el libro (y antes del concierto) visité el templo budista de mi amigo. ¡Changos marangos! Todo está unido y entrelazado.

The Buddha in Your Mirror (2001) Hochswender, Martin & Morino

Cada mañana, frente al espejo en mi casa, reconozco que mi verdadera naturaleza no está en lo que veo, sino en la conciencia que me habita. El budismo —o la bola de años, me ha revelado que soy más que mis experiencias, más que mis viajes por carreteras llenas de baches del sur de Veracruz o el autobhan.

La vida es sufrimiento, y yo, como buen mexicano educado por las telenovelas lo comprendo profundamente, mis dolores son las heridas emocionales que he acumulado como souvenirs en mi equipaje existencial.

Pero aquí está la revelación: ese sufrimiento no me define. Soy el observador, no la experiencia.

Cada kilómetro recorrido, cada canción sentida, son solo ondas en el mar de mi conciencia y sobre todo de mi consciencia. Puedo observar a estas dos embusteras y amantes despechadas rompiéndose la pantaleta en un programa de Carmen Salinas, así las veo, sin aferrarme.

Mi práctica comenzó no en los templos lejanos de Asia, sino en mi pequeño cuarto en Nanchital, donde meditaba entre posters de rock e ilusiones de viajar y mapamundis arrugados leyendo Siddharta de Hermann Hesse, aprovechando la oportunidad que siempre tuve de tomar un libro y viajar internamente, gracias Pa y Ma por tener libros en la casa.

La iluminación no es un destino, es un viaje constante de autoconocimiento. ¡Órale!

La transformación radical comienza cuando uno acepta que, uno mismo es una construcción y constante reconstrucción, tan variable como un jazz improvisado. 

No soy mi profesión, no soy mis recuerdos, no soy mis deseos, no soy mis posesiones, soy la conciencia que los experimenta.

En este momento, comprendo que cada experiencia - ya sea un concierto de rock, un viaje por carreteras desconocidas o un momento de silencio - es una oportunidad para despertar. 
Mi espejo no refleja mi identidad, sino mi potencial infinito.

Nanchital no es mi límite, es mi punto de partida, el universo late dentro de mí, tan intenso como un solo de batería del profesor Neil Peart y tan profundo como el río que cruza mi tierra.

Hasta pronto
nanche curtido

Espejo de metal que refleja a Buda (Siglo XVI)

Buda viendo un documental sobre Buda

Buda


Comentarios

  1. En una ocasión leí esta frase. El hombre que dice saberlo TODO es hombre muerto. La vida es constante aprendizaje a veces a través del dolor otras con alegría pero siempre aprendizaje TE AMO

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  2. Ta' muy chido;de lo mejor que he leído,escrito por ti.Te amo Gordon

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  3. Existe comunidad budista en México ?como por donde ?tengo amigos en la zona de Bucarelli en CDMEX Chinos de cuarta generación, se han convertido en testigos y católicos .los habremos echado a perder.?

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    1. Si lo hay, como en el resto del mundo, aqui el link :
      https://www.sgmex.org.mx/soka-gakkai-mexico

      Todas las religiones son positivas, pero hay que seguirlas de verdad.

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